Por Oscar Gómez*
Un distinguido representante del municipio de Tamayo, un gran defensor y propulsor de la Región Enriquillo, un gran profesional de la comunicación, un sureño de pura cepa, ha sido galardonado con el grado más alto de su profesión en el país.
El tamayero Osvaldo Santana, es el Premio Nacional de Periodismo 2017.
Y desglosamos las cualidades presentadas en el párrafo que antecede, cuando afirmamos que entre los muchos ilustres y destacados tamayeros, jamás se podría pasar por alto los aportes al desarrollo de su anhelado terruño que ha hecho a quien nos honrra dedicar este escrito.
Porque también cuando hablamos de la defensoría de su región, el periodista a que hacemos referencia no le ha temblado el pulso para escribir, ebocar o plasmar en cualquier opinión su apreciación sobre tal o cual situación que atañe al agreste, desolado y mil veces desprotegido Sur de sus entrañas.
Y lo ha hecho defendiendo la producción agrícola, el medio ambiente, el turismo, ríos, playas, su gente, su soberanía y más cercano su "Monte Grande".
Y todo lo anterior lo ha practicado a través del noble ejercicio que ejerce desde hace más de tres décadas, es decir utilizando como vía el que García Márquez reconoció un tiempo antes de dejarnos como "el mejor oficio del mundo".
Cuando nos referimos al "sureño de pura cepa", a quién le cabría mejor el concepto que a este hijo del Tamayo de las aguas bañadas por el Yaque del Sur, ese mismo río que con su torrente cristalino aún permanece incolumne adentrándose entre nuestros platanares, esos mismos que han de germinar en frutos tan vigorosos como el personaje que se ha homenajeado.
Precisamente por su trayectoria como profesional de la comunicación nos hemos honrado en dedicar estos párrafos, para destacar en síntesis algunas de las cualidades que adornan a nuestro también vecino de orígen.
En horabuena don Osvaldo Santana.. El autor es periodista.