La suspensión del partido de ayer entre los Tigres del Licey y las Aguilas Cibaeñas, en el estadio Cibao de Santiago, causó una gran molestia e indignación en la fanaticada de ambos equipos que esperaba el primer choque de los rivales en el round robin. Bajo el alegato de que las intensas lluvias que cayeron el sábado y la madrugada del domingo habían deteriorado las condiciones del terreno, al mediodía de ayer se anunció la suspensión del encuentro, con cinco horas de anticipación.
Sin embargo, levantó sospechas el hecho de que las Aguilas no contaban en su roster ni con Víctor Díaz, Jhonny Peralta o J. R. Towles, por diferentes razones.
El Licey, por su lado, no tenía abridor designado para el juego de hoy por la ausencia de Daniel Cabrera, quien está de viaje.
"Estuvo cayendo agua desde esta madrugada en el estadio… y aunque ha estado haciendo sol desde las nueve, el terreno está saturado de agua”, dijo Tomás Jiménez, administrador del Estadio Cibao, según una nota de Licey.com
El drenaje del Estadio Cibao, sin embargo, recibió una remodelación millonaria el año pasado para la celebración de la Serie del Caribe.
"Aquí, no ha caído ni una gota de agua, hace un reluciente sol, se puede jugar pelota" manifestó Francis Madera, del grupo de Liceyfans, que acompañan en caravana al equipo en cada viaje a Santiago, cerca de las tres de la tarde, también en la misma nota de prensa de Licey.com.
La Liga de Béisbol profesional de la República Dominicana, a su vez, envió un fragmento del reglamento que establece que "De suspenderse un partido antes de su inicio o sin que se haya completado el quinto (5to.) inning, ese partido se celebrará en la próxima fecha libre del Calendario”.
Bajo el entendido de que no se jugará el 31 de diciembre, se presume que el partido será celebrado el 6 de enero, que originalmente había sido designado como una fecha libre.
